lunes, 7 de septiembre de 2015

Un "must" de la ciudad: el Picalagartos

Cuando al pasar por casualidad por la calle Hernando Colón me lo encuentro abierto para desayunos casi no me lo creo, esta taberna es imprescindible en mi blog! El picalagartos es uno de aquellos lugares especiales, con esencia, únicos y genuinos, con un punto bohemio, en los que te encuentras bien en ellos.
Para colmo mirad qué pizarra me encuentro en la entrada... pan prieto de la Algaba! y encima a un precio estupendo.

Así que pido mi media tostada con aceite (oliva virgen extra) y tomate (puedes elegir rodajas o triturado) y un café con leche (catunambú). El desayuno está riquísimo y sólo vale 1,90 €.
Y para los guiris (o para los más atrevidos) aquí tienen esta otra pizarra:
Tienen unas mesitas fuera:
Local por dentro:
Y vosotros, ¿también sois fans del Picalagartos?



3 comentarios:

  1. He sido cliente habitual durante dos años, pero esta tarde consumiendo café con un grupo de amigos, estaba el dueño con un grupo de familiares en el piso superior como si estuvieran en el salón de su casa armando mucho barullo, tanto que perturbaba la tranquilidad que suele tener el negocio y se hacía difícil mantener una conversación. De una manera delicada (pues siempre es embarazoso pedir silencio) les he pedido que bajasen el volumen. La tarde se ha desarrollado tranquilamente hasta que el dueño me ha pedido que me levante y apartándome de mi grupo de amistades de una manera intimidante y casi amenazadora me ha pedido que nunca más vuelva hacer eso delante suyo. Indicándome que él nunca me ha dicho nada cuando en las reuniones que mantengo estoy mucho tiempo en el local sin consumir. Sé que es algo subjetivo medir cuánto es excederse en tiempo al permanecer en un local y es un tema controvertido, pero también dejo constancia que nosotros consumimos regularmente.

    El motivo de este comentario es reflejar la poca educación y las malas formas en las que el gerente del negocio se ha dirigido.

    Desde aquí dejo la sugerencia de que incluyan All—bran en el desayuno.

    Saludetes.

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  2. He sido cliente habitual durante dos años, pero esta tarde consumiendo café con un grupo de amigos, estaba el dueño con un grupo de familiares en el piso superior como si estuvieran en el salón de su casa armando mucho barullo, tanto que perturbaba la tranquilidad que suele tener el negocio y se hacía difícil mantener una conversación. De una manera delicada (pues siempre es embarazoso pedir silencio) les he pedido que bajasen el volumen. La tarde se ha desarrollado tranquilamente hasta que el dueño me ha pedido que me levante y apartándome de mi grupo de amistades de una manera intimidante y casi amenazadora me ha pedido que nunca más vuelva hacer eso delante suyo. Indicándome que él nunca me ha dicho nada cuando en las reuniones que mantengo estoy mucho tiempo en el local sin consumir. Sé que es algo subjetivo medir cuánto es excederse en tiempo al permanecer en un local y es un tema controvertido, pero también dejo constancia que nosotros consumimos regularmente.

    El motivo de este comentario es reflejar la poca educación y las malas formas en las que el gerente del negocio se ha dirigido.

    Desde aquí dejo la sugerencia de que incluyan All—bran en el desayuno.

    Saludetes.

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    Respuestas
    1. Hola Alter Ego,
      una lástima tu experiencia porque el lugar bajo mi punto realmente merece la pena.
      Espero que sólo se tratase de un mal día.
      Saludos y gracias por tu participación en el blog

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