El caso es que tras días y días viendo cómo el Mascarpone ubicado en Felipe II tenía un lleno absoluto a la hora del desayuno, me dije, hay que darle una oportunidad!
El resultado, en contra de lo que yo esperaba, fue muy bueno. Ahora comprendo el por qué del éxito de esta franquicia en desayunos.
Servicio muy eficiente y amable. Local moderno, con mesas dentro y fuera, lleno de gente.El aceite es de oliva virgen extra, procedente de Montellano. Hay que destacar que sólo a la vista se ve la calidad de dicho aceite, turbio y muy bueno. Está en mesas para servir al gusto, junto con tomate triturado para servir al gusto. Si se solicita te lo dan en rodajas.
Mantequilla, mermelada y paté en porciones. Eso sí, no hay jamón de pata negra.
El pan no es el prieto de la algaba pero es bueno y parecido, la media un bollito pequeño y la entera un bollito mediano.
El café es de su propia marca. Tienen prensa.
Los precios son competitivos media de aceite y tomate y café 1,50€ (hasta hace poco 1,20€), y entera de aceite y tomate y café, 1,80€ (hasta hace poco 1,80€). Estos precios son sólo válidos en el Mascarpone de Felipe II, en otros Mascarpones, y no sé por qué, los precios son más elevados.
Aquí va la foto de la entera, con un aceite excelente.También cuenta con tartas, donuts y bollería
Se entiende su éxito.
Exquisito el trato. Discrepo en el comentario del jamón... síndice es ibérico.
ResponderEliminarHola Luis, gracias por tu participación en el blog.
ResponderEliminarHubo una época en la que venía mucho a desayunar por aquí y siempre me he sentido muy a gusto allí, cierto: excelente trato.En cuanto al jamón, ten en cuenta que es una entrada antigua, seguramente lo habrán cambiado.